Donde colisionan la luz y la oscuridad, ahí estoy yo...

jueves, marzo 25, 2010

Hambre de libertad

Sin ti, los días se hacen eternos
y mi corazón se consume en el fuego
de la soledad, siempre atormentado,
hasta reducirse a cenizas mi ilusión.
Soy esclavo de tus caprichos
y me encadenas a tu recuerdo.
Por favor suéltame, desátame.
Estoy hambriento de libertad.
Tus flagelos ya no me duelen.
No me amas, pero me persigues.
No me amas, pero me sometes.
¿Te gusta hacerme sufrir?
¿Te excita verme padecer?
¡Destrúyeme o déjame vivir!
Vivimos un sueño agónico
y se que aun puedes sentir
los gritos sordos de mi corazón
implorando que llegue el fin.
Aun sigo ardiendo en el fuego
de la soledad, siempre atormentado.
Me abrazas con tu oscuridad
prometiéndome más y más dolor.
Pero tus flagelos ya no me duelen.
No me amas, pero me persigues.
No me amas, pero me sometes.
¿Te gusta hacerme sufrir?
¿Te excita verme padecer?

¡Destrúyeme o déjame vivir!

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